Es muy común escuchar decir que la ventana anabólica es un periodo en el que podemos comer todo lo que queramos luego de haber realizado ejercicio ya que no se acumulará como grasa, si no que se utilizará para la generación de masa muscular. Este es uno de los errores más comunes con respecto a la alimentación luego del entrenamiento, ya que la verdad no es así.

La ventana anabólica hace referencia a un periodo de tiempo que comienza al terminar el entrenamiento, donde al ingerir ciertos macronutrientes (carbohidratos y proteínas) se aumenta la hormona insulina, permitiendo el paso de aminoácidos hacia el tejido muscular, logrando una mayor reparación de tejido y, por lo tanto, una mejor construcción.

Algunos investigadores comentan que tiene una duración de hasta 60 minutos, pero en el último tiempo también se ha verificado que puede tener una duración de hasta 6 horas post entrenamiento. De todas formas, faltan estudios que verifiquen cualquiera de las dos situaciones.

A la vez, existen estudios donde la hipótesis de la ventana anabólica está formulada sobre la suposición de que el entrenamiento se realiza en estado de ayunas.  Así, en caso de realizar entrenamiento de fuerza después de una noche de ayunas, si tendría sentido proveer de una inmediata intervención nutricional, idealmente proteínas  y carbohidratos, para proveer la síntesis de proteínas musculares y reducir la proteolisis (degradación de proteínas), y por tanto cambiando de un estado catabólico o degradación muscular a uno anabólico (construcción muscular).

Lo que normalmente sucede es que antes del entrenamiento se consumen alimentos para favorecer el rendimiendo. Por ejemplo, si consumimos alimentos  3 – 4 horas antes del entrenamiento, claramente tiene sentido el consumir proteinas al finalizarlo,  para evitar el catabolismo muscular y llevarlo hacia un estado anabólico.

Por lo tanto, aún se requieren más estudios sobre la ventana anabólica, para poder determiner su duración y cual sería el major protocol a elegir. De todas formas, nunca está demás consumir alimentos o suplementos proteicos una vez finalizado el entrenamiento.